San Isidro, Argentina, AFP. – La icónica figura del fútbol mundial, Diego Maradona, ha sido objeto de atención mediática y legal tras su fallecimiento en noviembre de 2020. Este jueves, durante una audiencia que involucró a siete profesionales de la salud, su hermana reveló que Maradona «a veces se resistió» a recibir el tratamiento médico adecuado que necesitaba. Esta declaración se realizó en el marco de un juicio que investiga las circunstancias que rodearon la muerte del famoso futbolista argentino.

Las hermanas de Maradona, quienes han sido las voceras en este caso, anunciaron que las audiencias se llevarán a cabo en un tribunal ubicado en el suburbio de Buenos Aires, concretamente en la localidad de San Isidro, en la cuarta semana del juicio —un proceso que ha capturado la atención del público y los medios de comunicación, dado el estatus de Maradona como un héroe del fútbol argentino y mundial.

Claudia y Ana, las hermanas de Maradona, manifestaron su preocupación respecto a la salud de su hermano. Claudia, la más joven de las cinco hermanas, indicó que su hermano «a veces» mostraba resistencia ante las indicaciones de los médicos y que su personalidad era «fuerte». Ambas hermanas coincidieron en que Diego actuaba según su propio criterio, haciendo lo que deseaba sin considerar las advertencias de los profesionales de la salud.

Diego Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020, debido a un edema pulmonar causado por insuficiencia cardíaca. Este desenlace ocurrió mientras se preparaba para una intervención médica posterior a su neurocirugía. Las hermanas de Maradona afirmaron que discutieron sobre la decisión de brindarle cuidados en su hogar y enfatizaron que los médicos estaban al tanto de la situación. Claudia aseguró que «los médicos clínicos estarán allí» y que toda la atención necesaria debía estar garantizada para su hermano.

Durante la audiencia, otros testigos confirmaron que no había ambulancias ni equipos médicos como desfibriladores disponibles en el hogar donde Maradona pasó sus últimos momentos. Además, señalaron que el neurocirujano Leopoldo Luque, uno de los acusados en este caso legal, era considerado el médico de confianza de Maradona. En las semanas previas a su muerte, Ana recordó que la última vez que vio a su hermano en la clínica, él le expresó que «le dolía el alma», sugiriendo una profunda tristeza y pesar.

Se anticipa que el tribunal escuche a otra de sus hermanas, Rita, junto con la madre de Diego Maradona, Verónica Ojeda, en la jornada del jueves por la tarde. Siete profesionales de la salud, que incluyen médicos, enfermeras, psiquiatras y psicólogos, están siendo acusados, sugiriendo que sus acciones pudieron haber llevado a la muerte del futbolista. Un octavo acusado, una enfermera, se enfrenta a un juicio por separado.

El juicio, que dio inicio el 11 de marzo, está programado para continuar hasta al menos julio, con numerosos testigos que proporcionarán evidencias. Las penas que enfrentan los acusados varían de 8 a 25 años de prisión. El abogado de las hermanas Maradona, Pablo Jurado, ha expresado su desacuerdo con testimonios de otros demandantes, quienes sugirieron que podría haber existido un acuerdo entre el icónico futbolista y sus hermanas.

El enfoque del jurado en este caso puede influir en el resultado de sus justificaciones, particularmente en relación a otra disputa legal en la que los hijos de Maradona están reivindicando sus derechos sobre la «marca Maradona». Durante este proceso judicial, el tribunal no permitió disturbios externos y las hermanas tuvieron que brindar respuestas a las preguntas planteadas.

Claudia ha declarado que las marcas y derechos relacionados con la imagen y legado de Diego «nos dejaron a la familia», y en sus últimas conversaciones, él había mencionado que «los regalos son dados», refiriéndose a cómo deseaba que fuera recordado.