La vida pública de destacados funcionarios costarricenses ha tomado un giro inesperado, ya que el ex ministro Mauricio Batalla, junto con el presidente de la Comisión Nacional de Emergencia, Alejandro Picado, el director de aviación civil, Marco Castillo, y el fiscal de CNE, Henry Villalobos, se encontrarán en libertad durante esta noche. Esta situación ha causado un gran revuelo en el ámbito político y social del país.
El proceso legal ha estado en curso durante largo tiempo, y la oficina del fiscal dedicó nada menos que ocho horas a presentar sus argumentos y testimonios relacionados con el caso conocido como «carril oscuro». Este proceso judicial dio inicio a sus audiencias preliminares el pasado miércoles, lo que ha mantenido a la población al tanto de cada uno de los movimientos judiciales.
El segundo día de audiencias estaba programado originalmente para comenzar a las 9:30 de la mañana; sin embargo, como consecuencia de problemas surgidos con la defensa de los acusados, se hizo necesario reprogramar el inicio del día. Finalmente, se aprobó que la audiencia comenzara por la tarde, generando cierta incomodidad y expectativa entre las partes implicadas y los observadores del juicio. Durante la jornada, se ofrecieron pocos recesos, incluidos momentos para la cena y un breve intervalo para que los participantes del juicio pudiera reorganizar sus vehículos, dado que se cerró el estacionamiento en la proximidad del recinto judicial.
Después de las 11 p.m., los abogados del caso confirmaron que se habían tomado decisiones importantes, lo que abre la puerta a nuevas etapas dentro del proceso judicial.
«Track Dark» bajo la lupa
El escándalo conocido como «seguimiento oscuro» cobró fuerza la madrugada del martes, con 22 redadas que resultaron en la detención de cuatro personas. Este caso gira en torno a presuntas irregularidades en la gestión del aeropuerto de Liberia, lo que ha levantado serias preocupaciones sobre la transparencia y eficiencia en el manejo de recursos públicos.
De acuerdo con la Agencia de Investigación Judicial (OIJ), el Kantón de Guanacaste había sido recientemente acogido en una emergencia, a raíz de la Tormenta Tropical Bonnie. No obstante, las autoridades judiciales han puntualizado que el país no sufrió los efectos de dicho fenómeno natural y que los daños a la infraestructura que se han reportado habían ocurrido incluso antes de que la tormenta se desatara.
Por otro lado, se cuestiona abiertamente la calidad del trabajo realizado en relación a estas obras y se afirma que las condiciones laborales eran muy diversas de lo que se había prometido. La oficina del fiscal Futtiga ha manifestado que, a pesar de tales cambios en el escenario, las sanciones solicitadas no han sido aplicadas.
El progreso del proceso está siendo precedido bajo el archivo 24-000454-1218-PE, donde se encuentran presuntos delitos de influencia, la manipulación del tesoro público y el desvío de fondos. Se espera que la audiencia continúe a la 1:30 pm del jueves, cuando se solicitarán medidas de precaución como la separación de funciones, la prohibición de salir del país, y restricciones adicionales para los testigos.