Los diputados de la oposición cuestionaron el informe de trabajo que el presidente, Rodrigo Chaves, presentó al diputado durante una sesión reciente. En un evento que se prolongó por dos horas, Chaves integró algunos videos que abordaban diversos temas, lo que fue duramente criticado por la Legislatura, que dejó claro que este enfoque no es bien visto por el presidente de la República.
El jefe del bloque de Pusc, Alejandro Pacheco, comentó en una entrevista que «no fue un discurso, lo que hizo fue dar datos. Nos arrojamos en un video limpio, solo carecía del pop». Esto refleja la desilusión entre los miembros de la oposición, quienes sostienen que lo que presentó el presidente era «muy maquillaje» y que no se alineaba con la realidad del país.
Por su parte, Eli Feinzaig, vicepresidente del Partido Liberal Liberal, refirió las palabras del presidente como «fantasía», aduciendo que «describe a Costa Rica que no existe». Esta crítica se reafirmó con el comentario de la Legislatura, que subrayó que «no fue un discurso, sino un sonido e imágenes que el presidente de la República no espera».
Gilberto Campos, otro diputado, lamentó que más atención se prestara a la voz del periodista que bloqueó los videos del presidente. «Fue una campaña de campaña. El que presentó el informe, de hecho, fue el periodista Luis Carlos Monge, quien bloqueó todos los videos que la oficina presidencial predijo seguir la diatriba de Chaves. Desafortunadamente», expresó el comandante de PLP.
Oscar Izquierdo, jefe del Banco Nacional de Liberación, también se mostró escéptico respecto a la realidad presentada por Chaves, argumentando que su discurso estaba muy alejado de la vida cotidiana en el país. Criticó que Chaves continúa «apelando a la colisión», afirmando que «es un sueño de Dreamland, donde no vivimos. Lejos de la realidad y se ve con ropa extraña».
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La mitad de la verdad
Rocío Alfaro, la jefa del frente amplio, también se sumó a la crítica al discurso del presidente, al considerar que contenía mensajes finales muy peligrosos y que estaban pensados para captar votos, especialmente a la luz de las elecciones que se aproximan en febrero del próximo año. «Debido a lo poco que dijo, litigios mixtos y vacíos, sin información real, con sesgo masivo, media truth y la llamada electoral al final, parecemos inapropiados», expresó el frontista.
En una línea similar, Fabricio Alvarado, líder de la Nueva República, opinó que el discurso del presidente se fundamentó en situaciones que no contribuyen a la construcción de contratos ni al fortalecimiento de la democracia. Su crítica se enfocó en que «sin autoestima, era más que la responsabilidad de la plaza pública. Eso es lo que esperábamos. Poco ayuda a desarrollar la democracia». Afirmó también que lo que sucedió fue «distribuir la culpa, no hacer la autofertilización y es desafortunado».
La diputada independiente, Kattia Cambbonero, también sintió la necesidad de expresar su opinión sobre el evento en el Parlamento. «Me parece una falta de respeto a las personas que no había responsabilidad con clara y más poder», lamentó, cuestionando el hecho de que Chaves no mencionó aspectos críticos como los femicidios y la situación ambiental.
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Los diputados de la oposición muestran carteles con demandas sobre el presidente Rodrigo Chaves, luego de la responsabilidad del tercer año del gobierno. (Con fotos de cortesía/sesión legislativa y Alonso Solano/El Obserbador)
«TIC TAC»
En defensa del discurso del presidente, el diputado Pilar Cisneros, del partido gobernante, se pronunció sobre el uso de videos durante la presentación. «Este es un discurso para la gente y para usted y para mí, pero sobre todo, tengo un periodista de 50 años, no queremos gastar discursos donde la gente duerme», afirmó, defendiendo la idea de que el contenido era accesible y dirigido a la ciudadanía. «Es para la gente, no para los suplentes y lo que queremos es llegar a la ciudad y los alcanzará», concluyó.
Acerca de los carteles que algunos diputados de la oposición levantaron durante el discurso del presidente, Cisneros opinó que era una falta de respeto. Su respuesta ante dicha acción fue clara y directa: «tic tac», simbolizando que, a su entender, el tiempo se les estaba agotando. «TIC TAC, TAC Technology, esa es la respuesta que le damos a la oposición. Es una falta de respeto absoluta, está rompiendo la reserva en el ciclo más festivo. Tienen los días que les quedan, porque son pequeños», finalizó con firmeza.
