OTTAWA 28 de marzo (Europa Press) – El primer ministro canadiense Mark Carney dijo el jueves que la «antigua» relación de Canadá con Estados Unidos «terminó», después de que el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, anunció una tasa del 25% dada la posibilidad de colaborar «para dañar económicamente».

«Rechazo cualquier intento de debilitar a Canadá», dijo en una conferencia de prensa en el parlamento canadiense en Ottawa.

«La antigua relación que tuvimos con los Estados Unidos, dependiendo de la profundización de la integración de nuestras economías y la estrecha cooperación en la seguridad y los militares, ha terminado», se estableció.

Carney, quien juró el puesto de Jefe de Gobierno hace dos semanas después de la renuncia de Justin Trudeau, dijo que el equipo de Trump contactó una llamada, que probablemente tendrá lugar en uno o dos días, en la que será su primera conversación directa como presidentes.

«Aprecio la oportunidad de hablar sobre cómo podemos proteger a nuestros trabajadores y fortalecer nuestros ahorros. Especificaré al presidente que la cooperación y el respeto mutuo, incluido el respeto por nuestra soberanía, son los mejores aliados para estos intereses», dijo, según las noticias globales.

También indicó que luego comunicaría cómo reaccionó a los precios con medidas similares, aunque abogó por construir una «nueva economía» lejos de Washington, porque aseguró que el país debe «considerablemente» reducir la dependencia de su vecino del sur y buscar nuevos socios comerciales «confiables».

Los nuevos precios en el sector automotriz se agregan a los precios del 25% en todos los productos canadienses, así como un 25% adicional en las importaciones de acero y aluminio y un impuesto del 10% sobre la energía canadiense.