El año pasado, un incremento en la jubilación anticipada elevó notablemente los gastos de la institución en el pago de las pensiones IVM, el principal fondo de jubilación del país. Según lo que explicó a La Nación el gerente de pensiones, me gustan los barrios, esta situación obligó al CCSS a usar casi todo el interés de la reserva para cubrir el déficit y asegurar los desembolsos.

Los barrios no descartan que, si los ingresos de las colecciones y otras fuentes resultan insuficientes, será necesario usar la reserva para garantizar el pago de las pensiones.

«Los ingresos de las cotizaciones no son suficientes y se complementan con intereses de la reserva, pero aún no se ha tocado la reserva como tal. En 2024, utilizamos casi todos los intereses, por lo que la reserva no pudo crecer. (…) Es un riesgo que, dependiendo de las circunstancias, podría suceder este año, pero aún es un poco prematuro. Este es un problema que seguiremos monitorizando casi mes a mes», comentó el gerente.

Durante la sesión 9.499 de la Junta Directiva del CCSS, el 27 de febrero, el Director Financiero, Gustavo Picado, explicó que desde 2020, los gastos por el pago de las pensiones IVM han superado los ingresos de las contribuciones.

Sin embargo, esta discrepancia se amplió en 2024 dado que los ingresos alcanzaron $1,281,932 millones, mientras que el pago de la jubilación ascendió a $1,498,734 millones, lo que representa una diferencia de ¢216,802 millones. Esto es más del doble en comparación con la diferencia de 2023, que fue de ¢101,803 millones.

En 2022, la disparidad entre estos dos elementos fue de $80,899 millones, mientras que en 2021 y 2020 fue respectivamente de $62,030 millones y ¢589 millones.

IVM, debido al efecto del envejecimiento y factores como la revalorización de las pensiones, además del avance de ciertos trabajadores con la entrada de la reforma de enero de 2024, recibirá contribuciones por $1,281,932 millones, pero pagará pensiones de $1,498,934 millones en 2024.

– Gustavo Picado, Director Financiero de CCSS.

Este periódico ha consultado a los barrios sobre las declaraciones del director financiero respecto al uso de reservas IVM para cubrir la diferencia. El jerarca ha indicado que hasta ahora solo se han utilizado intereses y que aún no se han tocado los fondos de reserva.

Según las proyecciones de la última Evaluación Actuarial de Seguros de Discapacidad, Vejez y Muerte, presentada en septiembre del año pasado, se espera que el plan de pensiones entre en una fase crítica en 2035, cuando las cotizaciones no serán suficientes para cubrir los gastos del fondo.

El estudio estimó que hasta 2041, sería necesario recurrir a la reserva para mantener los pagos.

Sin embargo, Picado advirtió que desde 2020, los ingresos no han sido suficientes para cubrir los gastos, lo que representa la primera proyección en 15 años. Si se utiliza la reserva en 2025, el adelanto sería de 16 años.

Una vez que se agoten esos fondos, el artículo 177 de la Constitución establece que el déficit debe ser cubierto por el presupuesto nacional.

El pago de la deuda pendiente con el Tesoro podría equilibrar los gastos

La gestión de las pensiones de la institución analiza tres posibles fuentes de ingresos que pueden evitar recurrir a la reserva.

Según Barrantes, una de ellas es que el Ministerio de Finanzas cancele más de $56,000 millones adeudados a IVM, monto que el gobierno no incluyó en el presupuesto de 2018 y cuyo pago fue ordenado por la Cámara Constitucional en junio de 2020.

Los magistrados ordenaron al Ministerio de Finanzas y al CCSS buscar la forma de restaurar este dinero dentro de cinco años, comenzando en 2025. Los barriles confirmaron que, debido a los intereses acumulados, la deuda actualmente es de $68,000 millones.

«Algunas de las conversaciones que hemos tenido fueron sobre el saldo acumulado que el estado debería haber contribuido en 2018, el resultado de la orden judicial que establece que está muy avanzada. Hay una disposición del Tesoro para iniciar una negociación para ver si esta cantidad nos es cancelada», expresó el gerente de pensiones.

El ministro de finanzas, Nogui Acosta Jaén, confirmó a este periódico que están al tanto de la deuda pendiente y que será cancelada este año. Además, subrayó la necesidad de que la entidad evalúe la rentabilidad de su cartera respecto a las tasas de interés del mercado, ya que esto también puede aumentar la reserva.

Hay dos preguntas importantes: no solo la deuda implica que se debe usar la reserva, sino que el proceso demográfico del país también ejercerá presión. Los ingresos no alcanzarán para una población que envejece y vive más años.

– Nogui Acosta Jaén, Ministro de Finanzas.

«Hemos presupuestado, no quiero decir que está ahí, pagándoles $58,000 millones y $27,000 millones que es IVM», declaró Acosta.

El Jefe añadió que verificarán las preocupaciones planteadas por el CCSS, ya que son mayores que los recursos asignados por el gobierno. «Por supuesto, revisamos todos los cargos», indicó.

Luis Antonio Molina, vicecomunicador de finanzas, confirmó que se ha solicitado a la institución estatal respaldar la cantidad adeudada para verificar la cifra y realizar el pago correspondiente.

«Debe recordarse que en 2023, incluso si el Ministerio de Finanzas tuviera los recursos para entregarlos a dicha entidad, no fue posible transferirlos completamente debido a la falta de autorización presupuestaria de la caja», afirmó Molina.

Otras medidas podrían ofrecer un respiro a la reserva

Existen dos medidas planteadas por el gerente de pensiones para evitar el uso de la reserva, que incluyen la aprobación de una factura que transferiría la contribución del empleador del 0.25% del Banquero Populaire al CCSS para financiar las pensiones IVM, así como un aumento de contribuciones.

El proyecto de ley fue presentado por primera vez en 2019 por los agentes de la época, Pedro Muñoz y María Inés Solís, pero después de su vencimiento, el legislador Alejandro Pacheco, del Partido Cristiano de Unidad Social (PUSC), lo retiró en 2024.

Pacheco indicó a La Nación que el archivo ingresó al Comité de Asuntos Sociales en febrero y actualmente está en consulta con varias entidades. También mencionó que la transferencia de recursos no afectaría la operación del banco porque no forman parte de su giro principal ni de su fuente de financiamiento.

El gerente de pensiones subrayó como un punto adicional para mejorar la financiación del IVM que el aumento de los niveles salariales podría llevar a ajustes en las cotizaciones, promoviendo un aumento en los ingresos.

Por su parte, Gustavo Picado confirmó esta medida en la junta directiva de la Caja, que se celebró a finales de febrero pasado. También explicó que la contribución al plan de pensiones aumentará en un 0.5% en enero de 2026, lo que fortalecerá la recolección.