
El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) pronostica que las lluvias se prolongarán hasta diciembre en gran parte de Costa Rica, debido al retraso en el final de la temporada de lluvias.
Según Karina Hernández, experta de la unidad de climatología del IMN, la temporada de lluvias se prolongará al menos una semana más de lo habitual, con precipitaciones intermitentes incluso durante el último mes del año.
“Esperamos que la salida se retrase. En el Pacífico Norte, Pacífico Central y Valle Central se espera que la transición a la estación seca se dé en la última semana de noviembre”, explicó Hernández.
“Mientras que la transición en el Pacífico Sur se daría hasta la primera semana de diciembre”, indicó.
diciembre lluvioso
Según los expertos, el país también experimentará una transición más larga de lo habitual hacia la estación seca. Las lluvias serán esporádicas en zonas donde habitualmente prevalece el tiempo estable.
«Aún en diciembre tendremos lluvias. Ha pasado un diciembre en buen tico, porque tendremos condiciones favorables para eso», dijo Hernández.
Según el pronóstico del IMN, el Pacífico Sur podrá registrar un exceso de hasta un 15% de lluvia para los próximos meses, mientras que el Pacífico Central y Norte y el Valle Central tendrán entre un 5% y un 10% más de lo normal.
Inundaciones en el barrio Dent en San José durante el mes de octubre. (Foto cortesía/Bomberos).
frentes fríos
Además del retraso en la salida de las lluvias, la Oficina Meteorológica pronostica que la temporada de frente frío comenzará tarde; probablemente en diciembre.
También se estima que su influencia en el país será menor, como en el período anterior. Normalmente, la temporada de frentes fríos va de noviembre a febrero.
«Se espera que los frentes fríos comiencen tarde, al igual que el año pasado. La temporada 2025-2026 tendrá menos influencia en el país debido a un ‘bloqueo atmosférico’ que impide que las fuerzas frías lleguen al sur de Centroamérica», explicó Hernández.
El especialista explicó que este comportamiento está relacionado con las condiciones frías en el Océano Pacífico ecuatorial, que generan vientos más rápidos del oeste y dificultan el avance de los empujones hacia Costa Rica.
«El empuje se seguirá dando, pero se quedarán más al norte de Centroamérica. Sólo algunos llegarán al territorio nacional y su impacto será limitado», afirmó.
Islas del Caribe con posible sequía
Asimismo, el funcionario del IMN señaló que los efectos de una menor llegada de frentes fríos reducirán el aporte de lluvias a la Vertiente Caribe y la Zona Noreste, regiones que dependen de estos sistemas para mantener su humedad.
“Déficits importantes se observan en las Islas del Caribe Norte y Sur, especialmente en Limón y el Valle de La Estrella, donde el comportamiento de las precipitaciones ha sido deficiente en los últimos meses”, enfatizó Hernández.
«En general podemos decir que todavía estamos en el país sin sequía meteorológica, pero el Caribe presenta estas condiciones deficientes que se pueden consolidar si continúa esta tendencia», agregó.
Según los registros del Instituto, las Islas del Caribe podrían cerrar octubre con un déficit de hasta el 20%.
Mientras que el Pacífico Norte y el Pacífico Central terminarían con un superávit de hasta el 15% para el presente mes.
Respecto al Valle Central y Zona Norte Occidental – Guatuso, Upala y Los Chiles – las condiciones serán normales con 10% de lluvias.
Previsión de octubre a noviembre.
la chica
Respecto al fenómeno de La Niña, el IMN monitorea el enfriamiento del Océano Pacífico ecuatorial, aunque aclaró que no se ha confirmado el establecimiento del fenómeno.
«El Océano Pacífico ecuatorial está frío, especialmente en el este, pero seguimos bajo vigilancia. Aún no tenemos una respuesta atmosférica y se espera que el año 2025 termine en una fase neutral», dijo el climatólogo.
El especialista explicó que Costa Rica monitorea la región 3 del Océano Pacífico, que es la más cercana al país. Esto difiere de los informes oficiales de la NOAA de Estados Unidos, que trabaja con la región 3.4 y que tiene una influencia menor en el clima nacional.
Por ello, aunque la agencia estadounidense se mantiene alerta por La Niña, el IMN considera que el país continúa bajo vigilancia, con gran incertidumbre sobre su desarrollo.