Autoridades religiosas y políticas de Costa Rica están preparándose para el Fin de semana en el Vaticano, que coincide con el Funeral del Papa Francisco.

La Iglesia católica en Costa Rica ha confirmado que asistirán como representante del Arzobispo de San José José Rafael Quirós, quien será el único miembro de la cúpula religiosa del país que estará presente en este trascendental evento.

En su caso, el Arzobispo Quirós emprenderá su viaje a Roma el próximo Martes, donde se llevará a cabo la ceremonia de despedida. Este viaje no solo representa un acto de respeto hacia el Papa Francisco, sino también un compromiso con la comunidad católica de Costa Rica.

Por otro lado, el gobierno de Costa Rica también estará representado en el Vaticano durante el funeral. El Ministerio de Relaciones Exteriores ha confirmado que Federico Zamora, el embajador de Costa Rica ante la sede santa, estará presente para rendir homenaje al pontífice en este momento histórico.

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Protocolo más simple

La muerte del Papa Francisco fue anunciada el lunes, tras varios meses de complicaciones de salud. Los informes médicos indican que, a sus 88 años, el Papa sufrió un golpe cerebral, lo que llevó a su fallecimiento.

Desde el lunes, se activó el ceremonial relacionado con la muerte del Papa, comenzando con la verificación oficial de su deceso. Posteriormente, se realizaron las gestiones necesarias para la cancelación de las actividades en el Vaticano y se inició la preparación del cuerpo del Papa para los días siguientes.

A partir de este miércoles, los fieles ya tienen la oportunidad de dar el último adiós a su líder. El cuerpo del Papa Francisco estará expuesto para aquellos que deseen presentar sus respetos.

La ceremonia central para el funeral se llevará a cabo el sábado a las 10:00 a.m. hora local, es decir, a las 02:00 p.m. en Costa Rica. Esta ceremonia es un evento de gran relevancia para católicos de todo el mundo, quienes se unirán en oración y despedida.

Es importante destacar que, por decisión personal del Papa Francisco, el protocolo ha sido simplificado en comparación con los funerales de sus predecesores. Se ha decidido que será enterrado en la basílica de Santa María la Mayor, en vez de las criptas del Vaticano, un cambio significativo en las tradiciones anteriores.

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