Desde hace varios años, el área principal de San José ha enfrentado situaciones críticas y, lamentablemente, el colapso de infraestructuras es una de sus manifestaciones más visibles. Antes de las 6 p.m., se reportó que varias secciones de la ciudad sucumbieron a la presión de la congestión vehicular y a incidentes imprevistos.

Un evento significativo que generó caos se registró en la Ruta 27, cerca de la reconocida zona de Escazú. Este accidente, que involucró a varios vehículos, causó una interrupción notable en ambos sentidos de la carretera, con un impacto particularmente severo en la dirección que va de San José hacia Santa Ana. Las calles, que habitualmente soportan un tráfico pesado, se vieron desbordadas en cuestión de minutos, lo que levantó una ola de frustración entre los conductores.

En la información inicial proporcionada por las autoridades de emergencia, se detalló que se hizo atención médica a un vehículo que se impactó contra una barrera de seguridad en la Ruta 27, específicamente en el área del peaje cuando se dirigía hacia San José-Santa Ana. La Cruz Roja, que llegó rápidamente al lugar de los acontecimientos, atendió a un paciente crítico, un hombre de 31 años que, tras ser evaluado, fue declarado fallecido debido a lo que se sospecha fue un infarto fulminante. Este trágico suceso no solo conmovió a la comunidad, sino que también añadió un peso emocional a la ya tensa situación vial.

Sin embargo, los efectos colaterales del incidente no se limitaron al lugar del acontecimiento. Comenzaron a generarse problemas adicionales en otras rutas principales. Caminos como General Cañas, La Circunvalación y Paseo Colón comenzaron a experimentar un aumento notable de tráfico, provocando demoras significativas. Las congestiones también afectaron áreas cercanas, como la vecindad de La Sabana, donde los conductores se encontraban atrapados en interminables filas de vehículos.

Además, se han recibido múltiples informes sobre enfrentamientos en zonas como Pavas y La Uruca, particularmente en el área de Memberszma, lo cual ha incrementado aún más el estrés y la presión sobre los automovilistas que intentan navegar las complicadas condiciones del tráfico resultante. Este tipo de situaciones pone de relieve las luchas diarias que enfrentan los ciudadanos y la necesidad urgente de soluciones viables para mitigar los impactos en las infraestructuras viales y garantizar la seguridad de todos.