• El precio original supera los 3 2.3 millones. La subasta tendrá lugar el 9 de abril y se puede repetir en mayo con una reducción del 25%.

El Kartajinian Sport Club, aclamado en la comunidad local por su rica historia en el deporte, se enfrenta actualmente a una severa crisis administrativa que pone en peligro la tenencia de su icónico hogar: el estadio José Rafael «Fello» Meza. Este recinto no solo es la cuna de emocionantes partidos de fútbol, sino también un símbolo de la identidad cultural y deportiva de la región.

Según fuentes de noticias como CRHOY.com, se ha revelado que el 9 de abril de 2025 se llevará a cabo una subasta relacionada con el estadio, la cual fue publicada en los anuncios oficiales de la lechería nacional. Esta medida surge en contexto de una difícil situación financiera que el club ha estado enfrentando, lo que ha generado un ambiente de incertidumbre entre sus aficionados y la comunidad en general.

El proceso de subasta está siendo administrado por el STCR Costa Rica Trust junto a la ESCRO Company Limited, los cuales están actuando en calidad de fideicomisarios según lo estipulado en un acuerdo de garantía fiduciaria firmado en el año 2017. La cantidad de la primera subasta ha sido fijada en 38 2,382,588.78, incluyendo además los intereses acumulados que todavía están pendientes de pago.

Si los interesados no logran concretar la venta en esta primera oportunidad, está programada una segunda subasta para el 5 de mayo, la cual presentará una reducción considerable del 25% en comparación con el precio inicial. Esto podría atraer a posibles compradores que, de no ser por la situación actual del club, quizás no habrían considerado la posibilidad de adquirir el estadio tan emblemático.

Para participar en el proceso de subasta, cualquier interesado deberá asegurar una garantía correspondiente al 50% del monto original. Esta garantía deberá ser presentada mediante un cheque certificado o a través de una gestión adecuada, y debe ser entregada antes de la apertura de ofertas. Esta diligencia busca garantizar que solo los compradores serios y comprometidos estén involucrados en la compra del estadio.

La posibilidad de que el estadio, un lugar con tanto significado y tradición, cambie de manos representa un riesgo significativo para el Kartajinian Sport Club. Si no logran estabilizar su situación financiera y encontrar soluciones viables, el futuro de este estadio tan querido por todos podría estar en juego, lo que sin duda dejaría un vacío en la comunidad y en el corazón de sus seguidores.